Mediante el estudio de incompatibilidades genéticas a la pareja, prevenimos y evitamos la transmisión de 600 a 3000 enfermedades genéticas (dependiendo el tipo de estudio) a sus hijos.
Las enfermedades autosómicas recesivas son patologías de carácter hereditario que se encuentran en nuestros genes. Aunque su prevalencia en la población es muy baja (un 1 % de todos los recién nacidos), se trata a menudo de enfermedades graves e incurables. De hecho, las enfermedades genéticas son responsables de aproximadamente el 20 % de la mortalidad infantil y el 18 % de las hospitalizaciones pediátricas.
La gran mayoría de las personas somos portadores sanos de alguna enfermedad recesiva. Si nuestra pareja es también portadora de la misma mutación en sus genes, el riesgo de que un hijo de la pareja presente esa misma enfermedad es de un 25 %, de que sea sano 25% y de que sea un portador sano un 50 %, lo que podría tener implicaciones también para su futura descendencia.
Estos exámenes en sus 3 variantes llegan a reducir en forma proporcional a la complejidad del examen (si se analiza un número cada vez mayor de genes), el riesgo del nacimiento de un niño afecto en 1 cada 40.000 a 50.000, con las técnicas anteriores el diagnóstico es de 0,5 a 1 de cada 100, asegurando de esta manera una descendencia biológica sana.
El examen de compatibilidad genética (TCG) es un estudio para identificar mutaciones en los genes responsables de enfermedades recesivas y ligadas al cromosoma X. El estudio de este panel de secuenciación masiva del ADN da la posibilidad de analizar la presencia de los genes vinculados a las enfermedades autosómicas recesivas más graves, ya sea en su modalidad de examen de 600 o 3.000 enfermedades. Esta última modalidad es el estudio genético de portadores más amplio que existe en la actualidad. De este modo, a partir de una simple muestra de sangre, determinamos el riesgo de transmitir estas enfermedades a nuestros hijos y podemos evitarlo. Los resultados se obtienen en un tiempo no mayor a 4 semanas, para evitar la incertidumbre en la paciente.
El paciente puede elegir cualquiera de las siguientes modalidades de TCG, dependiendo del número de genes a estudiar.
Este análisis puede realizarlo cualquier pareja antes de buscar un hijo, sin embargo, lo recomendamos en los siguientes casos:
En caso de que se encuentren incompatibilidades genéticas en la pareja, existen medidas y tratamientos para evitar la transmisión de la enfermedad a los hijos.