Es una hormona producida por el sincitiotrofoblasto desde el inicio del embarazo y posteriormente por la placenta, su aparición en sangre o en orina confirma el mismo, sirve para controlar la evolución del embarazo en el primer trimestre. En reproducción humana se la utiliza al final de un ciclo de estimulación ovárica controlada, para completar la maduración de los óvulos previa a la aspiración folicular.