Ondas sonoras electromecánicas (no radiación) de alta frecuencia mayor a 20.000 Hz no audibles para el hombre, que se propagan a una determinada velocidad por un medio material (tejidos y órganos del cuerpo), su reflexión puede transformarse en imagen (ecografía) a ser interpretada por el médico. En reproducción humana se usan por vía vaginal y abdominal, mediante sondas ecográficas para el seguimiento folicular y para el control de la evolución del embarazo.