Óvulos de buena calidad
En reproducción asistida mencionamos con frecuencia la calidad ovocitaria y decimos que esta es mejor cuando los óvulos proceden de una paciente que se encuentra alrededor de los 25 años, de allí que las donantes son mujeres jóvenes, que están en estas edades. La donación de óvulos ha servido como modelo para conocer la buena calidad ovocitaria, ya que estos óvulos logran mejores tasas de fecundación, división embrionaria, formación de blastocistos, implantación y embarazos evolutivos.
En la mujer que busca un embarazo con sus propios óvulos, el principal marcador de la calidad ovocitaria es la edad, a mayor edad obtenemos en un ciclo de estimulación ovárica controlada, menor cantidad de óvulos y menor calidad de estos, lo que nos ha llevado a que en pacientes mayores de 38 años tenga que realizárseles el diagnóstico genético preimplantacional a los embriones, para seleccionar a los que tienen mejores posibilidades de implantación.
Así mismo la calidad de los óvulos puede verse afectada en enfermedades, como la endometriosis, ovario poliquístico, que están asociadas a infertilidad. También puede verse afectada en pacientes sometidas a tratamientos de radio – quimioterapia que dañan el ADN del óvulo, o por causas genéticas (fallo ovárico prematuro).
La valoración de la calidad ovocitaria en pacientes infértiles, en algunas ocasiones recién se conocerá cuando la paciente es sometida a una fertilización in vitro – ICSI, ya que en esta el óvulo mostrará su capacidad de generar un embrión evolutivo, desde luego en ello también tiene un papel preponderante la calidad espermática.
En algunas ocasiones no es factible llegar a valorar directamente la calidad ovocitaria y espermática, y a pesar de tener embriones morfológicamente normales no se logra un embarazo, siendo necesario proceder al examen de diagnóstico genético preimplantacional previo a la transferencia embrionaria.