Efecto de las infecciones de transmisión sexual (ITS) en la fertilidad

Las infecciones de transmisión  sexual (ITS) afectan a ambos miembros de la pareja, siendo su efecto más pronunciado en la mujer porque puede producir vulvitis, vaginitis, cervicitis, endocervicitis, endometritis, salpingitis, anexitis e infección peritoneal (enfermedad pélvica inflamatoria). En el hombre igualmente afectan al aparato genital masculino produciendo orquitis, epididimitis, prostatitis etc., deteriorando la calidad seminal, por lo que deben tratarse de manera simultánea, debiendo ser más prolongado el tratamiento en el hombre por las condiciones particulares de su aparato genital, ya que se requiere mayores dosis de fármacos administrados de forma más prolongada para tratar infecciones de la próstata (órgano con poca irrigación sanguínea) por ejemplo.

Las ITS más frecuentes son las producidas por virus (herpes tipo I y II, VIH, citomegalovirus, virus de la hepatitis B y C), bacterias (chlamydia, gonococo, gardnerella vaginalis, mycoplasma hominis, ureoplasma urealyticum, haemophilus ducreyi, klebsiella granulomatis, treponema pallidum), hongos (cándida) y parásitos (trichomona). Este tipo de infecciones pueden ser asintomáticas, ocasionando infertilidad o complicando la evolución de un embarazo pudiendo también transmitirse al feto o contagiar al recién nacido en el momento del parto.

Al momento disponemos de herramientas diagnósticas muy especializadas para el diagnóstico y tratamiento de estas enfermedades, debiendo tenerse en cuenta el tiempo transcurrido de exposición al contagio, ya que tienen periodos de incubación variables desde pocos días hasta 3 meses, así mismo disponemos de tratamientos con esquemas farmacológicos muy efectivos que se administran durante pocos días, lográndose la cura clínica y microbiológica.

Scroll al inicio
× ¿En qué podemos ayudarle?